Velocidad de la sombra.
Hambre.
Proyección.
Tu cuerpo desmaterializado te ha dejado sola. Ahora recorres el destino como una sombra sin cuerpo. Él se llevó los sueños y el futuro, a vos te tocó cargar las pesadillas y el presente, eterno presente, sin pasado y sin mañana. Ellos te miran y ríen, aun no aprendieron a llorar, los demás ni te ven, necesitás el brillo de la noche para que vean la sombra, pero ellos se esconden y vos seguís buscando un cuerpo que ya sabés inexistente.
Ausencias.
El asfalto se escapa de los autos que por no saber a dónde ir, lo aplastan una y mil veces. Las luces artificiales nos recuerdan que estamos en los dominios de la noche y que ella todo lo cubre. Sólo las almas muy valientes y las que ya han sido vendidas, se atreven a salir, las demás temen que la noche oscurezca sus vidas para siempre.
Zapatillas.
Maternidad.
Ley Fantasma
Zombis inmortales.
Condena eterna.
Fabricante de verdades.
Juicio.

Basura.
Esencia.

La noche te disuelve como a todos. De nada sirven los afeites y las cirugías. Solo la humanidad se nota, se siente y se intuye y solo de eso podemos enamorarnos o huir asustados. Por la mañana la luz nos robará la identidad y volveremos a ser una marca de ropa o una pobreza. Hoy fantasmas. Hoy humanos. Hoy perfectos.
Luces de noche.
Solo humo.
Parada obligatoria.
Te dicen donde parar y hasta donde seguir. Tu libertad es su juego macabro, su entretenimiento. Te muestran señales de su poder, de su látigo innoble. Pero en tu mente el camino es recto, sin paradas y ahí ellos no pueden entrar. Dejalos que piensen que te tienen, así te dejan ser y se olvidan de vos. 
